La adicción a los teléfonos celulares es mayor a lo que se presume. Según un estudio, 4 de cada 10 personas no conciben pasar un día alejados de un dispositivo móvil ya que se informan en internet, se comunican a través de chats, redes sociales o videojuegos online.
Un 25% los encuestados es adicto al teléfono móvil; 8 de cada 10 usan estos dispositivos, de manera continua, entre 2,5 y 4 horas diarias. Además, el 51% de la población lo primero que hace cada día es mirar su smartphone. E inclusive hasta un 14% reconoce que lo consulta mientras conduce.
¿Qué es el détox tecnológico que combate el estrés y la ansiedad?
Bajo esta dependencia que tenemos sobre los dispositivos tecnológicos en el último tiempo se ha comprobado que muchas personas padecen de estrés digital jornada a jornada.
En estos casos es necesario desconectarse por un período de los sistemas de mensajería instantánea, internet o las redes sociales, haciendo un détox tecnológico.
Se trata de una una especie de abstinencia a las pantallas. Es que, según detalló el profesor de Psicología y Marketing de la Universidad de Nueva York (EE UU), Adam Alter, “La adicción a los teléfonos inteligentes podría ser hipersocial, no antisocial y al hablarse del tema hay mucho pánico”.
De acuerdo con los estudios en la materia, este uso compulsivo se refleja en la ansiedad que produce no consultar el dispositivo con frecuencia.
¿Qué es la “nomofobia”?
Es el miedo a salir de casa sin el móvil; mientras que el "fomo", o temor a quedarse fuera de un grupo o excluirse por no saber algo; y el “phubbing”, que consiste en aislarse de las personas del entorno prestando más atención al móvil.
Todas estas son algunas de las señales que pueden constituir un factor de riesgo para caer en un problema de adicción.
¿Cómo evitar el estrés digital?
La primera acción para acabar con el "estrés digital" en el que se vive el día a día es la práctica del détox tecnológico, o desintoxicación digital.
Es sencillo pero difícil, ya que consiste en desconectarse de los dispositivos electrónicos y de las plataformas digitales durante un período determinado.
Este détox puede incluir apagar el teléfono celular, evitar el uso de redes sociales, limitar el tiempo frente a la pantalla de la computadora y buscar actividades que no requieran tecnología.
El détox tecnológico puede ser una herramienta poderosa para mejorar nuestro bienestar emocional en un mundo cada vez más digitalizado.
Al desconectarnos de la tecnología de manera deliberada y regular, podemos reducir el estrés y la ansiedad, mejorar nuestra concentración y productividad, fortalecer nuestras relaciones interpersonales y reconectar con nosotros mismos.
De manera que si has notado cierta adicción a las pantallas o a tu móvil, es hora de pensar en realizar este détox digital para evitar el estrés digital que genera esta “adicción”.