CURIOSIDADES

¿Es cierto que los toros odian el color rojo?

¡Qué las caricaturas no te engañen! Te contamos cómo ven los toros.

Pues pasa que no, y aquí te contamos por qué.
Toros.Pues pasa que no, y aquí te contamos por qué.Créditos: Juan Carlos García
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Seguro has visto en las caricaturas o películas que llaman la atención de algún toro con una capa roja o con cualquier objeto de color rojo... pero ¿es cierto que los toros se enfurecen u odian el color rojo? 

En las corridas de toros, se observa cómo el torero utiliza una muleta para atraer al toro que es color rojo, lo que nos haría creer que esto es verdad, pero la ciencia ha demostrado que este mito no es más que una creencia errónea. Te contamos los orígenes de este mito.

¿Qué tan cierto es que los toros odian el color rojo?

Contrario a la creencia popular, los toros no odian el color rojo. De hecho, los toros son daltónicos en cuanto a los colores rojo y verde, lo que significa que no pueden distinguir entre estos dos tonos.

Para los toros, la muleta que utiliza el torero podría ser de cualquier color y tendrían la misma reacción. Entonces, ¿por qué parece que el toro se enfurece cuando ve el color rojo?

El mito de que los toros odian el color rojo tiene raíces antiguas y está profundamente relacionado con la tradición de las corridas de toros. Desde hace mucho tiempo, el color rojo ha sido asociado con la violencia, la pasión y la agresión, lo que hace que sea un color visualmente impactante en el contexto de una corrida.

Sin embargo, los toros no reaccionan al color rojo por la simple razón de que no pueden percibirlo de la manera en que lo hacen los seres humanos.

¿Cómo ven los toros el color rojo?

Los toros, al igual que la mayoría de los mamíferos no primates, tienen una visión dicromática. Esto significa que tienen dos tipos de células receptoras de color en sus ojos, conocidas como conos. Mientras que los humanos tienen tres tipos de conos, lo que les permite ver una gama amplia de colores, los toros solo pueden percibir tonos de azul y amarillo. Es decir, para un toro, el color rojo simplemente se ve como una tonalidad gris oscura o marrón.

¿Qué provoca realmente a los toros?

Si los toros no odian el color rojo, entonces ¿qué los incita durante una corrida? La respuesta está en el movimiento. Los toros son animales muy reactivos al movimiento, y esto es lo que realmente desencadena su comportamiento.

Cuando el torero agita la muleta frente al toro, no es el color lo que llama su atención, sino el movimiento rápido y constante del objeto. Los toros reaccionan instintivamente a movimientos bruscos porque en su entorno natural, los depredadores suelen moverse de manera similar.

De hecho, en algunas corridas de toros, se ha experimentado con muletas de diferentes colores, como azul o blanco, y la respuesta del toro ha sido la misma. Esto confirma que el color no es un factor en la agresión del toro, sino más bien la forma en que el objeto se mueve delante de ellos.

El uso del color rojo en las corridas de toros

A pesar de que el color rojo no provoca a los toros, sigue siendo un componente clave en las corridas de toros, pero más por razones estéticas y tradicionales que funcionales. El color rojo tiene un simbolismo potente en muchas culturas, y en el contexto de la corrida de toros, representa la sangre, el coraje y la pasión.

El color rojo es vinculado con emociones fuertes, como la ira y el peligro, lo que refuerza la idea errónea de que los toros son atraídos o enfurecidos por este color. En la psicología del color, el rojo es visto como un color estimulante y enérgico, lo que probablemente influyó en su adopción para las corridas de toros. Desde un punto de vista estético, el contraste entre la muleta roja y el toro negro es visualmente impactante.

Numerosos estudios han analizado el comportamiento de los toros en diferentes situaciones, y la mayoría concluyen que el toro reacciona al estímulo visual y auditivo, más que a cualquier color en particular.

Entonces el uso del color rojo en las corridas de toros tiene más que ver con el simbolismo cultural y la estética que con cualquier reacción biológica del toro.