La segunda entrega de una de las producciones más emblemáticas y reconocidas del último siglo ha llegado a la cartelera de algunos de los cines más importantes de la región. “Avatar el sentido del agua” es el título de la segunda parte de la exitosa película dirigida por el canadiense James Cameron. Mientras estuvo en cartelera la primera cinta del director canadiense, los seguidores sufrieron intensos anhelos por la luna planetaria representada en Pandora y sus humanoides Na’vi.
En algunos portales de internet surgieron foros creados por los fanáticos de esta saga, en donde opinan al respecto de las películas y comparten sus comentarios sobre la historia de estos personajes azules. Por ejemplo, en el foro Avatar Forums, un tema titulado "Maneras de lidiar con la depresión del sueño de que Pandora sea tangible" llegó a recibir más de 1.000 publicaciones de personas que habían experimentado la depresión.
De todas maneras, el Síndrome de Depresión Post-Avatar no es un problema reconocible para el medio The Guardian, pero si es un fenómeno para observar. Algunos sentimientos que profesan los fanáticos de la entrega son la tristeza por saber que se sienten desconectados de la naturaleza y mientras que otros manifiestan preocupación por el futuro del planeta.
"La vida virtual no es la vida real y nunca lo será, pero este es el pináculo de lo que podemos construir en una presentación virtual hasta ahora". Se ha tomado lo mejor de nuestra tecnología para crear este mundo virtual y la vida real nunca será tan utópica como parece en la pantalla. Hace que la vida real parezca más imperfecta", explicó el doctor Stephan Quentzel, psiquiatra de Nueva York (EE. UU.), a la CNN en 2010, y aplica a la perfección para analizar el fenómeno Avatar.
Según el medio The Guardian hay una solución para curar esta sensación de depresión: simplemente salir y experimentar la naturaleza, tomar medidas para defender la tierra y hacer que otros hagan lo mismo.