Apple, una de las empresas más innovadoras en el campo de la tecnología, se encuentra en la fase de preparación para el lanzamiento de su próximo gran producto, las gafas de realidad mixta, que combinan la realidad virtual y la realidad aumentada. A pesar de la expectación que rodea a este nuevo dispositivo, algunos empleados de la empresa no están convencidos de su potencial comercial.
Uno de los principales motivos de la desconfianza de los empleados es el elevado precio que se rumorea que tendrá este dispositivo, alrededor de los 3.000 dólares, lo que lo convertiría en uno de los productos más caros de Apple. Además, algunos ingenieros han abandonado el proyecto tras cuestionar su potencial y utilidad real.
A diferencia del iPod o del iPhone, cuyos usos eran claros desde el principio, las gafas de realidad mixta han generado escepticismo entre algunos empleados de Apple, que se preguntan si realmente tienen una razón clara para existir. La falta de una idea clara sobre los usos prácticos del dispositivo podría ser un factor importante en la falta de entusiasmo.
Por otra parte, los repetidos retrasos en el lanzamiento del dispositivo han generado desconfianza en la compañía, lo que ha llevado a Apple a planear un lanzamiento cauteloso, con un número limitado de unidades disponibles en el mercado en el primer año. La empresa espera enviar solamente 500.000 unidades durante 2023, lo que indica que su confianza en el éxito comercial de las gafas de realidad mixta no es tan alta como en otros lanzamientos anteriores.
A pesar de las dudas internas, Apple sigue trabajando en las gafas de realidad mixta, que se espera que sean presentadas oficialmente en junio durante la conferencia WWDC 2023. La combinación de realidad virtual y realidad aumentada en un solo dispositivo podría ser una auténtica revolución tecnológica si logra encontrar un mercado amplio y dispuesto a pagar el elevado precio.