Limpiar y desinfectar la lavadora será fundamental para extender su vida útil y también para que la ropa que lavemos tenga buen aroma y quede sin manchas. Los residuos se acumulan en diferentes partes y es necesario llegar a todos los rincones. La forma más fácil de identificar que el artefacto está sucio o no está funcionando correctamente por alguna obstrucción es a través de la ropa, la cual sale con pelusa, tierra o incluso manchada. Por ende, ante estas señales deberás realizar el mantenimiento correspondiente.
Expertos aseguran que una falta de limpieza de la lavadora causará, además, mal olor en la zona del tambor y el filtro, lo que también indicará la presencia de hongos, virus, bacterias y moho. Es importante tener en cuenta que es un dispositivo encargado del aseo, por lo que todos los restos de suciedad, jabón o residuos son los principales enemigos de su funcionalidad. En consecuencia, aquí te dejamos una guía rápida para limpiar y desinfectar el electrodoméstico.
¿Cómo limpiar la lavadora?
1- Programar un ciclo de lavado: realizar un ciclo completo de lavado sin ropa. Esto permitirá la eliminación de los residuos que puedan quedar pegados en las prendas o en las paredes del tambor.
2- Dar un segundo funcionamiento al ciclo de lavado: en este paso, agregar 5 tazas de vinagre una vez que la lavadora esté cargado de agua, sumando con media taza de bicarbonato de sodio.
3-Dejar que el programa centrifugue: esto permitirá que cualquier residuo sea removido.
4- Limpiar el interior con un paño húmedo: este paso debe realizarse una vez que el ciclo de lavado terminó. Puede realizarse con lejía.
¿Cómo desinfectar la lavadora?
1-Preparar una solución de agua y lejía (3 litros de agua cada media taza de lejía).
2-Colocar la solución en la lavadora: una parte colocarla en el compartimiento del jabón y el resto en el tambor.
3-Programar un ciclo de lavado con agua caliente: el agua a alta temperatura será clave en la desinfección profunda.
4-Realizar un lavado final para garantizar que no queden residuos.
5-Una vez finalizado el ciclo, limpiar el interior con un paño humedecido en agua y vinagre, pasándolo por los rincones del tambor.