TIPS DE HOGAR

Piénsalo dos veces antes de tirar tu corcho de vino: esto es lo que podrás hacer con él

Si tienes corchos de vino en casa, aquí te traemos dos trucos para reciclar y reutilizarlos, dándole así otro uso.

Dales otra vida
Corchos de vino..Dales otra vidaCréditos: Freepik
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El corcho es un material que se puede reciclar fácilmente, por lo que una vez que lo tengamos en nuestro poder y sin uso alguno, podremos utilizarlo en otras cosas, como por ejemplo haciendo llaveros o stopers para pies de las sillas y evitar que el piso quede arañado. En consecuencia, si tienes corchos de vino en tu poder, guárdalos para hacer estos trucos.

La mayoría de botellas de vino vienen acompañadas por tapones de corcho, los cuales sirven para proteger su contenido, pero pueden tener una segunda vida con un poco de creatividad. Expertos en manualidades recomiendan conservarlas, por lo que te brindamos dos ideas para que le saques el máximo provecho. Luego de abrir la botella de vino, es usual que las personas conserven los corchos en sus casas, por lo tanto, seguramente tendrás alguno. Y si no tienes, pídele a tus familiares que probablemente te ayudarán.

Los corchos de vino tienen particularidades únicas, al tener una gran elasticidad y compresibilidad. Y uno de los corchos más utilizados para tapar las botellas de vino es el natural, que se extrae de la corteza del alcornoque. Además de reciclarse, puede reutilizarse para crear diversas figuras útiles para el uso diario.

¿Qué puedo hacer al reciclar corchos de vino?

Llaveros

Para esto utilizaremos tres tapones de corcho, una cuerda de 50 cm de largo con un grosor de 2-4 mm de espesor, ganchos tipo tornillo y argollas para llaveros. El primer paso será introducir uno de los ganchos tipo tornillo por uno de los extremos de un corcho. Luego uniremos la cuerda a una de las argollas para llavero y realiza nudos. Finalmente, une la cuerda al corcho y realiza otros nudos

Corchos de vino. Foto: Pexels

Stoper para pies de sillas

Al reciclar corcho también podremos ponerlos en los pies de las sillas, ya que es un material no resbaladizo. Para este truco cortaremos finamente corchos de vino y los pondremos debajo de los pies de las sillas o debajo de una puerta. Así verás cómo ya no tendrás roces desafortunados con el piso.

Corchos de vino. Foto: Pexels