Las ollas y cacerolas tienen tapas, un elemento muy importante para la gastronomía y que los alimentos reciban la cocción adecuada. No obstante, también es una realidad que esta pieza suele perderse con extrema facilidad o que muchas veces no está a mano cuando se la necesita. Si eso te sucede, debes conocer este truco para solucionar el inconveniente.
Lo que debes saber es que el acto de utilizar tapas más grandes que le pertenecen a otras ollas puede parecer una gran idea. Más allá de ello, la realidad es que los especialistas en gastronomía no lo recomiendan porque se pierde el vapor de la cocción y propiedades esenciales que le dan el sabor definitivo a los alimentos.
En estos casos una solución ideal es el papel de aluminio, un elemento que te permitirá salir de varios apuros en el caso de que no encuentres las tapas de las ollas. Este objeto es un conductor del calor maravilloso y además facilita el proceso de las cocciones de los alimentos.
Al usar el papel de aluminio, los alimentos van a mantenerse húmedos y no perderán su sabor. Una forma maravillosa de utilizarlo es recubriendo las ollas con el papel para que no pierda la cocción homogénea de todos los alimentos de adentro. No obstante, hay otras alternativas.
El paso a paso para crear una tapa de olla con papel aluminio
- Corta el papel de aluminio del tamaño de tu olla o cacerola;
- Utiliza unos guantes de cocina para evitar cualquier tipo de accidente y quemadura;
- Colócalo sobre la olla con mucho cuidado y asegúrate que la parte brillosa esté hacia adentro;
- Puedes usar esta tapa provisional de olla con el papel de aluminio las veces que sean necesarias.