La limpieza de los faros del coche es una cosa; mientras que, según los expertos, el acto de pulir estas piezas es otra totalmente distinta. La ubicación en la parte delantera hace que sufran de forma constante las inclemencias de la meteorología, pero también de los elementos que proyectan las vías por donde se circula. Por eso te dejamos algunos trucos que te pueden servir.
5 técnicas para pulir los faros del coche
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Limón y bicarbonato
Lo único que se necesita es colocar bicarbonato de sodio en un recipiente, cortar medio limón y mojarlo en él. Luego, debes extender la fruta por todo el faro en círculos. Ten en cuenta que debes repetir la operación varias veces para que se cubra toda el área de la limpieza. Luego de unos instantes, debes eliminar las piezas restantes de la fórmula con un paño seco.
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Vinagre
Este producto de limpieza es excelente para pulir los faros del coche. Los más recomendados para estas acciones son los que están preparados a base de manzana, vino tinto y blanco. Sus propiedades son claves para eliminar la grasa, la cal y la suciedad. El truco está en calentar el vinagre sin hervirlo y luego verterlo en un recipiente con pulverizador. Después de esparcirlo, hay que quitarlo con agua y jabón.
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Ceniza
Si tienes una chimenea y prefieres no encargarte de la limpieza puedes utilizar los restos para pulir y abrillantar los faros del coche. Debes tener en cuenta que no toda la ceniza es válida porque a veces tiene restos de madera y otras partículas que pueden rayar las ópticas. Por ende, lo recomendable es tamizarla antes de mezclarla con agua y extenderla por el tren delantero. Para terminar debes frotar con un paño húmedo.
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Agua, jabón y lijas
Debido a que las lijas desbastan la superficie de los faros, tienes que jugar con distintos gramajes. Lo ideal es iniciar con granulometrías de 500, pasar a la de mil y terminar con la de 2 mil. El secreto está en empaparla con agua y trabajar realizando movimientos circulares. Después, tienes que aplicar el jabón y retirarlo con un paño húmedo.
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Pasta de dientes
Este es posiblemente el método más difundido, pero no funciona siempre por lo que algunas personas lo consideran como un objeto con el que no hay que limpiarlos. A veces es por la superficie del policarbonato; mientras que otras por el tipo de dentífrico utilizado. Si quieres intentarlo debes limpiar con agua y jabón los faros para eliminar la suciedad superficial. Después, la limpieza continúa con un secado para evitar que se rayen. Luego de esto, tienes que enmarcar el perímetro con cinta aislante para que la pasta de dientes no afecte la pintura. Recién ahí podrás colocarla y dejarla actuar durante 5 minutos para que pueda pulir tus faros del coche. No olvides terminar con limpiacristales y secar con un paño.