El aceite de pescado es un complemento dietético extraído de la grasa de pescados azules como el atún, arenque, caballa, sardina, salmón y trucha. Aunque existen otras bebidas que son beneficiosas para disminuir el colesterol, este óleo es valorado por su alto contenido en Omega-3, lo que lo vuelve un ácido graso indispensable para la salud del corazón.
¿Qué beneficios tiene el aceite de pescado?
El consumo de este aceite es fundamental para nuestro organismo porque proporciona ácidos grasos y ácido eicosapentaenoico (EPA), dos propiedades que benefician al corazón.
Además, el omega-3 posee propiedades antiinflamatorias que ayudan a personas con enfermedades como la arterioesclerosis y el reuma. Otro componente crucial del aceite de pescado es el ácido docosahexaenoico (DHA), que ayuda a reducir los niveles de triglicéridos.
Consumirlo también, reduce el riesgo de enfermedades cardíacas y coronarias. Mejora la salud general del corazón y ayuda a controlar la hipertensión al bajar la tensión arterial.
Por otra parte, expertos indicaron que es beneficioso para ayudar a equilibrar la glucosa en sangre (diabetes). Como también, su alto contenido oleico favorece la hidratación de la piel y otros tejidos.
¿Cómo se toma el aceite de pescado?
Para aprovechar estos beneficios, se recomienda incluir en la dieta el consumo de pescados azules al menos dos veces por semana.
Otra forma de poder consumir aceite de pescado es mediante complementos dietéticos. Estos se pueden conseguir en cualquier farmacia. A diferencia del óleo de oliva que, si lo mezclas con bicarbonato, elimina arrugas, este solo mejora la salud cardiovascular, articular y controlar la diabetes.