LIMPIEZA

5 cosas que jamás debes colocar en el lavavajillas

No dejes que tu lavavajillas se dañe, o estropee a tus platos y cubiertos, y presta atención lo que lavas en el.

Foto: Producción Chismecito.
Aprende a cuidar tu vajilla y tus electrodomésticos.Foto: Producción Chismecito.
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El lavavajillas es uno de los electrodomésticos más útiles, ya que nos permite dejar utensilios relucientes, como este truco exclusivo para copas y platos. Sin embargo, durante su uso, debemos prestar atención a recomendaciones de expertos, debido a que existen algunos objetos que no podemos lavar en el artefacto.

¿Qué cosas nunca deben ir en el lavavajillas?

  • Utensilios de acrílico: Aunque muchos se sorprendan, esto puede ser perjudicial para ya que si tiene grietas, la humedad se puede quedar en el interior de este tipo de materiales y terminará generando moho.
  • Cosas fabricadas con hierro fundido: Ingresar este producto dentro de tu lavavajillas puede terminar con el hierro oxidado. Se recomienda lavarlo a mano a una temperatura adecuada para que no se dañe.
  • Tazas: Si tus tazas son térmicas y las ingresas en el electrodoméstico, pueden perder sus propiedades para calentar líquidos.
  • Sartenes antiadherentes: Si la ingresas en el lavavajillas puede perder este beneficio y que cuando cocines se pegue toda la comida, por eso debes lavarlas a mano.
  • Cuchillos afilados: Estos pueden perder el filo o moverse y dañar el resto de los platos que estén dentro.

¿Cómo funciona un lavavajillas?

Si es la primera vez que usarás un lavavajillas, por más que parezca fácil, debes leer el manual de instrucciones y prestar atención a las recomendaciones de uso y seguridad. Fíjate que no quede ningún resto de plástico envoltorio en el interior para prevenir que se derrita y termine dañando los filtros.

Se recomienda comenzar con un enjuague con el electrodoméstico vacío para quitar cualquier resto de tierra o residuos de fábrica. Ahora sí, para lavar los platos y utensilios por dentro, se bombea agua caliente y detergente mediante el uso de unas aspas giratorias internas.

El agua suele salir con abundante presión para limpiar tu vajilla, aunque muchos prefieren darles una 'lavadita' a todo antes de ingresarlo. Luego, el lavavajillas realiza un ciclo de enjuague, sin usar detergente. Al terminar del lavado, el agua se drena automáticamente y los platos se secan gracias al calor interno.