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El lado oculto de la reina Isabel II: así era su repertorio de chistes

La monarca era muy graciosa, e incluso le hacía bromas a sus invitados.

Fuente: producción Chismecito
La reina Isabel II era muy graciosa, e incluso siempre hacía bromas.Fuente: producción Chismecito
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La reina Isabel II siempre será recordada no solo como una de las monarcas más icónicas del siglo XXI, sino que además rompió récords como la royal más longeva de la historia.

Muchos de sus nietos y quienes la conocieron en privado aseguran que la madre del actual rey Carlos III era muy graciosa, chistosa. Incluso solía comenzar sus conversaciones ‘rompiendo el hielo’.

¿Cuál era el repertorio de chistes de la reina Isabel II?

El ilustrador satírico británico Craig Brown, ha lanzado un libro que repasa la vida de la difunta Reina a través de noticias y anécdotas de quienes la conocieron. En dicha obra, el autor asegura que Isabel II tenía "un repertorio de chascarrillos o chistes que repetía en diferentes ocasiones".

Reina Isabel II. Fuente: archivo Chismecito

Para poder llegar a este dato, el autor entrevistó a la laborista Clare Short, quien una vez, cuando estaba en reunión con la Reina, le sonó el teléfono. Acto seguido la monarca le dijo: "Conteste, podría ser alguien importante". 

Brown declaró que la reina Isabel II, por su reserva, era "un enigma", y la gente proyectaba en ella lo que quería. Además, en algunos momentos, cuando se entrevistaba con diversas personalidades mundiales estos llegaban a quedarse sin palabras, empezaban a desbarrar o incluso se orinaban encima, contó.

¿Cómo se llama el libro de Craig Brown sobre la reina Isabel II?

El libro lleva por título "A voyage around The Queen" (Viaje alrededor de la reina) y el autor asegura que no es una biografía, sino que se trata de una obra curiosa que gira en torno a Isabel II ya que ella fue más famosa y durante más tiempo que los Beatles".

¿Qué otros momentos graciosos protagonizó la reina Isabel II?

En 2021, la reina Isabel II asistió a un evento benéfico en Cornualles junto con Kate Middleton y la actual reina Camila. En un momento, la monarca tenía que partir un pastel usando una espada ceremonial. 

Cuando un voluntario del evento le recordó a Isabel II que había disponible un cuchillo normal, la reina respondió: "Sé que lo hay", replicó, sin dejar de asir la espada. "Esto es más inusual".

¿La reina Isabel II actuó alguna vez?

La monarca se animó a protagonizar uno de los momentos más chistosos e icónicos de las celebraciones de su Jubileo de Platino. Isabel II se filmó  tomando el té con el oso Paddington para el sketch que dio inicio a la fiesta de la BBC en el palacio por los 70 años en el trono.

Cuando las celebraciones estaban a punto de comenzar, el oso Paddington le ofreció a la Reina su snack favorito: un sándwich de mermelada.

"Siempre guardo uno para emergencias", le dijo, sacando uno de su famoso sombrero rojo. "Yo también", respondió la reina, que abrió su característico bolso negro y extrajo el suyo. "Yo tengo aquí el mío, para después", agregó.

¿Isabel II le hizo una broma al presidente Barack Obama?

En el año 2016 la reina Isabel II se volvió viral por realizar un video junto a su nieto, el príncipe Harry, con motivo de los Juegos Invictus.

Allí abuela y nieto se mostraron viendo un mensaje de video de los entonces presidente y primera dama de Estados Unidos, Barack y Michelle Obama, quienes retaron al príncipe Harry a un desafío deportivo. La respuesta de la Reina dejó a todos atónitos: "Oh, ¿de verdad? Por favor", dijo.

¿Qué opinaba la reina Isabel II de aquellos que la llamaban ‘vieja’?

En otro memorable recuerdo, el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau opinó sobre la edad de la monarca, y en una Reunión de Jefes de Gobierno en 2015, Trudeau señaló que era el duodécimo primer ministro canadiense que ocupaba el cargo durante el reinado de la reina Isabel II.  En respuesta, Isabel II agradeció al ministro por hacerla "sentir tan vieja".

Como si todo esto fuera poco, la reina Isabel II era muy cariñosa y chistosa hasta con sus familiares. Por ejemplo, a su difunto esposo, el príncipe Felipe de Edimburgo le había puesto un apodo o sobrenombre cuando estaban en la intimidad.