CINE DE ORO

Cine de oro: el productor que perdió a su hijo y decidió vengar su muerte

Raúl de Anda Gutiérrez sufrió por el asesinato de su hijo de 27 años, por eso cayó en depresión y después cobró venganza.

Fuente: Instagram @cinemexicano_deoro
Agustín De Anda y Ana Bertha Lepe..Fuente: Instagram @cinemexicano_deoro
Escrito en VIAJE AL PASADO el

La época dorada del cine mexicano está llena de historias fascinantes y trágicas. Una de las más conmovedoras es la de Raúl de Anda Gutiérrez, un influyente productor y director que vio su vida destrozada tras el asesinato de su hijo Agustín de Anda.

Este trágico suceso lo llevó a una profunda depresión y a una búsqueda implacable de venganza que afectó tanto su vida personal como profesional. Raúl, quien tuvo cinco hijos —Raúl, Rodolfo, Antonio, Gilberto y Agustín—, vio a cada uno de ellos relacionarse con el mundo artístico, pero fue Agustín quien dejó una huella imborrable en el cine de oro mexicano.

¿Qué pasó con Agustín de Anda, el hijo asesinado de Raúl de Anda?

Agustín de Anda comenzó su carrera actoral en 1953, y rápidamente se destacó por su talento interpretativo. Su habilidad lo llevó a ganar el premio a la mejor interpretación masculina en el IX Festival Internacional de Cine de San Sebastián por su papel en ‘La cárcel de Cananea’.

Sin embargo, su prometedora carrera se vio truncada de manera abrupta cuando fue asesinado el 29 de mayo de 1960, a los 27 años. El responsable de su muerte fue el padre de Ana Bertha Lepe, quien se oponía vehementemente a que su hija se casara con Agustín.

Este asesinato no solo conmocionó a la industria cinematográfica mexicana, sino que devastó a su familia, especialmente a su padre, Raúl de Anda. La tragedia desencadenó en él una profunda depresión y lo llevó al alcoholismo, sumiéndolo en una oscuridad de la que nunca se recuperó del todo.

¿Cómo fue la supuesta venganza de Raúl de Anda?

El dolor por la pérdida de su hijo llevó a Raúl de Anda a buscar una forma de venganza. A pesar de haber dejado el mundo artístico para ceder el paso a sus hijos, que comenzaban a brillar en la pantalla grande, decidió usar su influencia para perjudicar a Ana Bertha Lepe, la prometida de su hijo y una destacada actriz de la época.

Según se dice, Raúl de Anda organizó un complot para que otros cineastas no le dieran papeles ni trabajo a Ana Bertha Lepe, utilizando su renombre y conexiones en la industria para llevar a cabo su plan.

Agustín De Anda. Fuente: Instagram @cinemexicano_deoro

Mientras que Agustín será recordado por su talento y su trágica muerte, Raúl quedará en la memoria colectiva como un padre devastado que buscó venganza en medio de su sufrimiento. Sus vidas y su tragedia siguen siendo un capítulo significativo y conmovedor en la historia del cine mexicano.