La nariz es la entrada principal del sistema respiratorio y el órgano encargado del olfato. Según un estudio elaborado en la Universidad de Rockefeller de Estados Unidos, el ser humano puede distinguir más de un billón de olores diferentes.
La nariz, aunque pocos lo sepan o perciban, es el único órgano que puede cansarse. Ante la presencia de un olor desagradable, el cerebro lo detecta y logra acostumbrarse hasta que sea casi imperceptible. Algo que no ocurre con la vista o el gusto.
Además, el ser humano tiene una gran memoria olfativa. Al estar conectado el olfato directamente con el sistema límbico, es muy común asociar algunos olores con la niñez, ya que la nariz es un órgano que está muy asociado con los recuerdos emocionales.
Curiosidades de la nariz y el olfato
- La nariz crece hasta la adolescencia, cuando se completa el desarrollo craneal.
- Puede aumentar levemente de tamaño durante la excitación sexual.
- Aunque no crece, cuando la persona miente, la nariz aumenta de temperatura y puede ponerse colorada. Esto es porque aumenta la presión sanguínea y se inflaman los tejidos de la nariz.
- Un adulto puede respirar entre cinco y seis litros de aire por minuto. Además, durante la respiración, se expulsa más de la mitad del agua que se bebe por día.
- A través de la nariz se limpia, se templa y se humedece el aire que ingresa al cuerpo.
- La pérdida del olfato es conocida como anosmia. Esto se puede producir por la inflamación de las vías nasales, por un traumatismo o una enfermedad. La falta de olfato es uno de los síntomas característicos del coronavirus, lo que ayudó a detectar muchos casos durante la pandemia.