Uy... eso ya suena a caries. Las muelas picadas son más comunes de lo que crees, y lo peor que puedes hacer es hacerte el loco, al igual que si notas sarro en tus dientes que también puede perjudicarte. Y es que esa molestia chiquita se puede volver un problemón con dolor y una cuenta carísima en el dentista.
Y lo peor es que a veces ni te das cuenta hasta que ya está bien fea la cosa. Pero tranqui, aquí te voy a contar por qué se te pican las muelas, cómo evitarlo y, lo más importante: qué deberías dejar de comer si ya tienes una muela dañada.
¿Por qué se pican las muelas?
Básicamente, porque las bacterias hacen fiesta en tu boca. Comes, no te cepillas bien, y los restos de comida se quedan ahí, dándoles de comer. Ellas sueltan unos ácidos que van rompiendo el esmalte... y ¡zas! caries.
También influye si te pasas con los dulces, si no usas hilo dental, si te cepillas a la carrera o si nunca visitas al dentista. Hasta la genética puede jugar en tu contra, así que no todo es culpa del chocolate.
Es muy importante que lleves a cabo un tratamiento cuanto antes con el fin de curar, ya que aquellas caries que no se tratan adecuadamente y en el momento, pueden hacerse más grandes y provocar infecciones en muchos casos irreversibles.
¿Cómo evitar que se te piquen las muelas?
Fácil, lávate bien los dientes al menos dos veces al día, usa hilo dental, aunque dé flojera, sí, y enjuágate con un buen enjuague bucal. Ir al dentista cada seis meses también ayuda un montón, aunque no sientas nada raro.
Y sí, menos azúcar, menos drama. No andes picando dulces todo el día, toma mucha agua y no te vayas a dormir sin lavarte la boca. Parece básico, pero de verdad funciona.
Cabe mencionar que cuando ya presentas muelas picadas, los dentistas recomiendan algunos tratamientos para casos extremos como los siguientes:
- Coronas dentales.
- Tratamientos a base de flúor.
- Empastes dentales.
- Endodoncia.
- Extracción de muela.
¿Qué no deberías comer si ya tienes una muela picada?
Si ya tienes una muela con caries, los especialistas recomiendan que le digas adiós a los caramelos duros, las palomitas y todo lo pegajoso tipo gomitas o chiclosos, pues estos se meten en los dientes y pueden empeorar la situación.
Y ojo con lo que tomas: lo muy frío o muy caliente te puede dar un buen golpe de dolor, y los refrescos o jugos ácidos solo hacen que el esmalte se desgaste más rápido. Mejor agua y comida suavecita... al menos hasta que el dentista te dé el visto bueno.
Recuerda la importancia de acudir al dentista para recibir el tratamiento adecuado en función del estado en el que se encuentre esa muela picada.