Una crema antiarrugas es esencial para el cuidado de la piel y garantizar la belleza del rostro. Es que estos pliegues, aliados del envejecimiento, pueden causar diversos impactos en la mujer, ya que algunas se lo toman como algo totalmente malo y otras conviven con ellos como plenas marcas de experiencia. Pero si quieres reducir tus arrugas, te enseñaremos a preparar una crema en casa, usando dos ingredientes.
Con estos productos evitarás aplicar en el cutis sustancias químicas que causen resequedad o irritación. Además, ayudarán a conseguir una piel de porcelana, combatiendo el déficit de colágeno y elastina. En la misma línea, el cuidado de la piel estará garantizado y podremos contrarrestar la falta de vitalidad, brillo y el exceso de líneas de expresión y arrugas.
Esta crema antiarrugas casera contará con la ventaja de no aportar ningún químico o conservante. Al mismo tiempo, contrariamente a lo que suceden con la mayoría de los cosméticos actuales, se trata de un producto que, al ser casero, no es testeado en animales.
El pepino y el aloe vera serán los ingredientes perfectos para hidratar la piel en profundidad, previniendo las arrugas que se forman por deshidratación. Las propiedades del vegetal y de la suculenta nos ayudarán a combatir los radicales libres, conocidos como los principales causantes del envejecimiento celular, al mismo tiempo que estimulará la producción natural de colágeno y elastina que hará que la piel se vea tensa y firme, con una belleza radiante.
Así podrás elaborar tu crema antiarrugas casera
Para comenzar con esta crema antiarrugas deberás licuar 100 gramos de pulpa de aloe vera y 100 gramos de pepino. La elaboración continuará agregando agua destilada, hasta que quede una crema uniforme y sin grumos. Una vez finalizado, podrás aplicar la crema antes de dormir para eliminar las arrugas. De acuerdo a especialistas, no deberás limpiar ni enjuagar la zona trabajada, para que el cuidado de la piel sea efectivo gracias a esta crema casera.