El árbol de jade es una de las plantas preferidas de millones de personas en todo el mundo. Una de las causas es que es fácil de cuidar, es ideal para interiores y, además, según el Feng Shui atrae la abundancia y el dinero si se la coloca en un lugar correcto.
Esta suculenta no requiere muchos cuidados, los expertos recomiendan regarla de vez en cuando y debe ser ubicada en lugares que no reciben luz solar de forma directa. De hecho, lo ideal es situarla en un sitio con estas características, pero en el living.
El Feng Shui recomienda esto último porque allí se concentran todas las energías del hogar. O sea, la planta aportará un granito de arena para que los habitantes obtengan dinero y abundancia. Por otra parte, algunos recomiendan la cocina por lo mismo.
Más allá de esa información vinculada a explotar sus características, detrás del árbol de jade y de todos sus beneficios, hay una leyenda que tiene su origen en China. Esta explica el motivo por el que muchas personas la consideran una planta sagrada.
La leyenda que pone al árbol de jade como una suculenta sagrada
El origen de la leyenda que coloca esta suculenta como una planta sagrada está ubicado en la antigua mitología de China. Según ella, que aunque tenga relación no debemos confundir con el Feng Shui, el árbol de jade posee una naturaleza sagrada y divina.
El árbol de jade habría sido creado directamente por los dioses. Esto se puede explicar debido a que las hojas y las ramas de la planta funcionan como un símbolo de la conexión que existe entre el cielo y la tierra.
Esta sería la causa por la que la piedra de jade tiene propiedades purificadoras. Por lo tanto, el árbol de jade se transformó en un símbolo de la salud y la prosperidad. Además, claro, según el Feng Shui es un signo de armonía y buena suerte.
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