El cabello es una parte elemental de la personalidad de las personas. No solamente por el surgimiento de las canas, que denota el envejecimiento, sino que por la aparición de caspa y otro tipo de afecciones. En este tipo de casos, lo ideal es hacer un buen baño de luz.
Esta técnica de coloración tiene como principal objetivo añadir calor y brillo al tono natural del cabello. Consiste en realizar una preparación con agua oxigenada, champú y tinte de cabello que luego se debe aplicar durante 15 o 20 minutos aproximadamente.
Se trata de un tinte ácido que hace suaviza increíblemente al cabello. La principal ventaja que tiene este método es que es súper sano porque no usa compuestos químicos. El baño de luz suele ser muy utilizado por quienes buscan matizar el tono de la coloración existente.
¿Cómo hacer un buen baño de luz?
Lo primero que debes hacer, antes de realizarlo concretamente es tener en cuenta algunas características del baño de luz:
- El PH ácido equilibra, balancea y estabiliza los niveles naturales del cabello
- Aporta pigmentos a las fibras capilares
- No aclara el tono, pero sí realza los cabellos opacos
Una vez que hayas comprendido esto, debes tener en cuenta que necesitas ciertos ingredientes para que el baño de luz tenga éxito. Son los siguientes:
- Tinte de tipo baño de luz
- Agua oxigenada
- Champú
Por último, solo debes preparar el baño de luz. En un recipiente debes colocar los tres ingredientes y mezclarlos. Debes tener en cuenta que la preparación debe ser aplicada en el cabello húmedo y debe reposar como mínimo durante 20 minutos. Para finalizar debes lavar bien tu cabeza.