La plancha es uno de los electrodomésticos que más polémica genera en los hogares y entre los motivos está la limpieza. Algunas personas desestiman la posibilidad de utilizarlo y no les molesta que la ropa esté arrugada; mientras que hay otros que no pueden tolerar la existencia de un mínimo pliegue.
El uso frecuente de la plancha puede provocar determinadas fallas en el electrodomésticos como su mal uso puede generar quemaduras en los atuendos. La clave está en utilizarlo con cuidado para que la ropa quede en buen estado, pero también el metal del aparato.
En el caso de que alguna mancha aparezca en el metal, debes saber que existen métodos para hacerlas desaparecer sin mucho esfuerzo. Por lo tanto, si te sucede esto ni siquiera pienses en la posiblidad de comprar una nueva plancha debido a que existe solución.
¿Cómo dejar mi plancha como nueva?
La clave de la limpieza de la plancha está en que debe realizarse con una periodicidad mensual para que cada vez requiera menos esfuerzos. Los inconvenientes se producen cuando se vuelve "pegajosa" por las altas temperaturas del metal que se pone en contacto con la ropa.
Para evitar los inconvenientes y dejar la base de la plancha en excelentes condiciones debes tener un ingrediente clave de tu cocina: sal gruesa.
El paso a paso para dejar limpia la plancha
- Coge un poco de sal y colócala en una superficie resistente al calor (Puede ser un metal o caserola)
- Vamos a dejar reposando nuestra plancha sobre esta ‘cama’ de sal.
- Deja este electrodoméstico prendido hasta que llegue a altas temperaturas.
- Deberás mover suavemente y con firmeza la plancha sobre la sal: hazlo por 15 minutos.
- Este ingrediente de cocina absorberá esta suciedad y la plancha quedará brillosa justo en la base.
Debes tener en cuenta que si quieres mejorar el efecto de esta limpieza puedes utilizar aceite de oliva y tu plancha va a quedar como nueva.