La flema es un tipo de mucosidad producida en los pulmones y las vías respiratorias. Esta puede presentarse en varios colores y cada uno de ellos significa una afección distinta. Antes de seguir te dejamos un artículo con una infusión para eliminarla fácilmente.
La mucosidad o flema es clave para evitar que los gérmenes y distintos materiales ingresen al organismo por las vías respiratorias y pulmones. En ese sentido, evita que los agentes externos invadan el organismo y causen determinadas enfermedades.
Según Medical News Today, si la flema "es clara y delgada y no se nota en absoluto". Sin embargo, "cuando alguien se enferma de resfriado o una infección, la mucosidad puede espesarse y cambiar de color”. O sea, el color marca el estado de los pulmones.
Dime el color de tu flema, y te diré cómo están tus pulmones
Según los expertos en salud, el color de la flema es un indicador del estado de los pulmones y de otros órganos del sistema respiratorio. Si la mucosidad tiene alteraciones, las personas tienen un punto de partida para saber si deben preocuparse o no.
- Transparente: es normal. Se compone de agua, sales, anticuerpos y otras células del sistema inmunitario. Después de producirse en el tracto respiratorio, la mayor parte baja por la garganta y se ingiere.
- Café: puede indicar posible sangrado, aunque no reciente.
- Rojo brillante o rosa: indica un sangrado reciente.
- Negro: puede indicar la presencia de una infección micótica. De ser el caso, hay que acudir al médico inmediatamente.
- Blanco: es señal de congestión nasal.
- Amarilla: sugiere que las células inmunitarias están empezando a funcionar en el sitio de la infección u otro tipo de agresión inflamatoria.
- Verde: indica una respuesta inmune, pues los glóbulos blancos, los gérmenes y otras células, y las proteínas producidas durante la respuesta inmunitaria son los que dan a la flema su color verde.
Si te interesa este tipo de contenido, te dejamos un artículo con determinadas causas que pueden provocar flema y problemas en la voz.