En el contexto laboral mexicano, el despido de un empleado es un tema delicado que puede generar conflictos y controversias entre los patrones y los trabajadores.
Y es que la Ley Federal del Trabajo (LFT) establece que el empleador que quiera prescindir de los servicios de uno de sus empleados deberá otorgarle una liquidación. Pero ¡ojo!, porque existen casos en los que te podrían despedir y no están obligados a pagarte.
¿Qué es la liquidación laboral?
De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, se entiende como liquidación la indemnización que el empleador está obligado a pagar al trabajador en casos específicos por la terminación de la relación laboral por responsabilidad del patrón.
Estas son algunas de las causas por las que sí o sí tienen que pagarte tu liquidación, según la LFT:
- La empresa rescinde el contrato por motivos que no tienen que ver con el desempeño del trabajador, como es el caso del cierre de la empresa, la reestructura de un área, o la desaparición del puesto.
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La decisión del trabajador de renunciar a causa de una falta grave cometida por el patrón, de acuerdo con el Artículo 51 de la Ley Federal del trabajo, entre las que se encuentran la reducción de su salario o que se le exija “la realización de actos, conductas o comportamientos que menoscaben o atenten contra su dignidad”.
Recuerda que el cálculo de la liquidación implica considerar el salario de 20 días por cada año trabajado, junto con porciones proporcionales de los días de vacaciones, aguinaldo y la prima vacacional, más las prestaciones que haya generado el trabajador y que no se le hayan pagado aún al momento de su despido.
Estas son las razones por las que te pueden despedir sin liquidación
Pero no todo es color de rosa, ya que la Ley Federal del Trabajo también establece las condiciones bajo las cuales un empleado puede ser despedido sin derecho a liquidación. Estas son las razones principales, de acuerdo con dicha normativa:
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Engaño durante el proceso de contratación: esto aplica para aquel trabajador que mienta sobre sus capacidades, aptitudes o facultades al momento de ser contratado. En este caso puedes ser despedido sin liquidación, siempre y cuando se demuestre el engaño.
- Faltas de probidad u honradez: en caso de que el trabajador incurra en faltas de probidad u honradez, así como cometer cualquier tipo de violencia en contra del patrón, sus familiares o el personal de la empresa, o en contra de clientes y proveedores, durante sus labores.
- Daños materiales a la empresa: dañar intencionalmente edificios, obras, maquinaria, instrumentos, materias primas y demás objetos relacionados con el trabajo.
- Acciones que comprometan la seguridad: realizar actos que pongan en peligro la seguridad del establecimiento y/o de las personas que en ese momento se encuentren en él.
- Acoso laboral: actos de hostigamiento o acoso sexual hacia cualquier persona en el entorno laboral constituye una falta grave.
- Revelación de información o secretos: otra de las razones sería en caso de que el trabajador divulgue secretos de fabricación y/o dé a conocer asuntos de carácter privado.
- Faltar sin justificación: faltar a trabajar más de 3 veces sin justificación en un lapso de 30 días, o sin permiso del patrón.
- Desobediencia: en caso de que el empleado desobedezca al patrón en relación al trabajo, sin causa justificada.
- Presentarse bajo la influencia de alcohol o drogas: asistir a trabajar en estado de embriaguez y/o drogado, excepto con prescripción médica.
- Documentación incompleta: en caso de no contar con los documentos requeridos por ley para desempeñar el trabajo.
Recuerda que entender estas causas es crucial tanto para los empleados como para los empleadores, ya que puede influir en la forma en que se manejan las relaciones laborales y en la protección de los derechos de ambas partes.