Las plantas pueden sufrir el ataque de distintas plagas, sin embargo, algunas no podemos verlas para combatirlas. De esta forma, la peste daña el ejemplar al punto tal de debilitarlo y luego causar su muerte.
Según expertos en jardinería, entre las plagas más difíciles de combatir se encuentran aquellas que están en el sustrato y la tierra de la maceta o el jardín, por lo que no las veremos salvo que notemos señales en las plantas y nos pongamos específicamente a escarbar en el lugar.
Este tipo de plagas se alimentan de las raíces de las plantas, causando una coloración totalmente amarilla en el ejemplar. Si notas esta señal, será momento de ponerte a trabajar para combatirlas.
¿Cuáles son las plagas que atacan las raíces de las plantas?
Larvas de Scarabaeidae
Conocidos popularmente como gusanos blancos, se caracterizan por vivir 4 años antes de convertirse en escarabajo y sólo se alimentan de raíces de plantas. Para eliminarlas, profesionales de jardinería recomiendan utilizar agua caliente mezclada con jabón para lavar trastes o acudir bicarbonato de sodio.
Pulgones de raíz
En el sustrato también encontrarás pulgones de raíz, caracterizados por un color blanco, café o amarillo. No se mueven a grandes velocidades como los pulgones de tierra, pero sí tienen la virtud de transportarse de una maceta a otra en poco tiempo, ya que su tránsito predilecto es el agua de riego. Para esta plaga también es conveniente utilizar agua y jabón.
Larvas de moscas
Por último, la tercera de las plagas que encontraremos en el sustrato de las plantas serán las larvas de moscas. Se alimentan de raíces y las lesiones que le causan a los ejemplares suelen ofrecer una vía de invasión para hongos, matando la planta en cuestión de días.
Para combatir esta plaga, profesionales de jardinería recomiendan utilizar agua caliente con bicarbonato de sodio o vinagre.