El Parkinson es una enfermedad que afecta al 1% de los pacientes mayores de 60 años y al 0,3% de la población general. Hace un tiempo se conoció cuál es el deporte que puede ayudarte a frenar la enfermedad, aunque un nuevo dato sacudió a la industria médica.
Esta enfermedad se caracteriza por la degeneración de ciertas células nerviosas en una parte del cerebro llamada sustancia negra. Las células nerviosas en la sustancia negra son responsables de producir una sustancia química llamada dopamina, que es crucial para la coordinación del movimiento.
Cuando estas células mueren o se dañan, se produce una deficiencia de dopamina en el cerebro, lo que conduce a los síntomas característicos del Parkinson. En los últimos años han cobrado mucha importancia nuevos aspectos de la enfermedad.
¿Cuál es el síntoma que puede aparecer 20 años antes del diagnóstico?
Los trastornos del olfato, especialmente las alteraciones cuantitativas, hiposmia que puede ser leve, moderada o grave, es una de las manifestaciones más frecuentes en la enfermedad de Parkinson. Esto puede preceder hasta incluso 20 años a la aparición de las manifestaciones motoras.
A a través del estudio del olfato (olfatometría), se puede realizar un diagnóstico precoz. Esto permitirá al paciente saber lo que tiene, y ser tratado de la manera correcta, ofreciéndole la mejor calidad de vida.
Según especialistas, en los últimos años es creciente el interés científico en valorar las alteraciones olfatorias. En pocas palabras, es un marcador de enfermedades neurodegenerativas.
A pesar de que el Parkinson no tiene cura, los medicamentos pueden mejorar notablemente los síntomas. En algunas ocasiones, el grupo médico puede sugerir una cirugía para regular determinadas zonas del cerebro y mejorar los síntomas.
Los síntomas más comunes del Parkinson
- Temblor en reposo: temblor involuntario que generalmente comienza en una mano o un dedo.
- Rigidez muscular: sensación de rigidez o dificultad para moverse, especialmente al levantarse de una posición sentada.
- Bradicinesia: lentitud en los movimientos voluntarios.
- Problemas de equilibrio y coordinación: dificultad para mantener el equilibrio y coordinar movimientos.
- Alteraciones en la marcha: pasos más cortos y lentos, arrastre de los pies o dificultad para iniciar o detener el movimiento.
¿Cómo prevenir el Parkinson?
Hasta la fecha, no existe una forma comprobada de prevenir esta enfermedad, ya que sus causas exactas aún no se comprenden completamente. Sin embargo, algunos estudios sugieren que ciertos factores pueden estar asociados con un menor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Ejercicio regular
Mantenerse físicamente activo puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar Parkinson. El ejercicio aeróbico, como caminar, correr, nadar o andar en bicicleta, así como el entrenamiento de fuerza, pueden ser beneficiosos.
Dieta saludable
Consumir una dieta rica en frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y grasas saludables puede tener un efecto protector. Algunos estudios sugieren que una mayor ingesta de antioxidantes, como la vitamina E y C, podría prevenir los síntomas.
Mantener un peso saludable
La obesidad en la mediana edad se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar Parkinson en la edad adulta. Mantener un peso corporal saludable a lo largo de la vida puede ayudar a reducir este riesgo.
Como pudimos ver, el parkinson puede afectar distintas áreas de la vida de quien lo padezca. Recientemente se conoció que quienes lo padezcan podrán mejorar su caminar gracias a una novedosa intervención.