El colágeno es una proteína esencial que dice presente de forma abundante en el cuerpo humano. Sin embargo, deja de producirse en grandes cantidades desde los 25 años y, por eso, las personas buscan sumarla con métodos alternativos para sumarlo y eliminar las arrugas. Uno muy interesante consiste en preparar una crema casera con pocos ingredientes.
¿Cómo preparar una crema casera de colágeno?
Lo único que vas a necesitar son ingredientes que fomenten la producción de colágeno o que lo tengan incorporado. La proteína dice presente en diversos elementos naturales que aportan beneficios a la piel.
Ingredientes para la la crema de colágeno
- 1/4 de taza de manteca de cacao o crema base.
- 1/4 de taza de aceite de coco.
- 1 cucharada de aceite de almendras.
- 2 cucharadas de gelatina sin sabor (la verdadera fuente de colágeno).
- 1/2 taza de agua caliente (no debe estar hirviendo).
Preparación y aplicación de la crema de colágeno
Para empezar, debes preparar la base de colágeno. Para esto, tienes que disolver las cucharadas de gelatina sin sabor en el agua caliente. Mezcla hasta obtener una solución homogénea, sin grumos, y deja reposar hasta dejarla a temperatura ambiente.
Mientras se enfria deberás preparar la crema. En un recipiente, combina a baño maría la manteca cacao o la crema de base con el aceite de coco. Una vez derretidos, retira del fuego y añade el aceite de almendras y mezcla bien. En ese instante, deberás incorporar lentamente la gelatina y removerla constantemente hasta obtener una preparación homogénea.
Por último, vierte la crema en un recipiente y deja que se enfrie a temperatura ambiente para hacer más sencillo el proceso de solidificación. Lo ideal es guardar en un sitio fresco y seco. La aplicación también es sencilla: deberás aplicar en el rostro limpio y lampiño. Lo ideal es hacerlo antes de dormir para que los nutrientes actúen. Debes retirarla al otro día al lavar tu cara.
¿Cuál es la función del colágeno?
Esta crema está cargada de colágeno y tiene una doble función. Por un lado, hidrata y repara la piel, manteniéndola suave, hidratada, elástica y sin arrugas. No está de más resaltar que la efectividad dependerá del tipo de cutis y las condiciones ambientales.
Por otra parte, la proteína ayudará a fortalecer los huesos, músculos, tendones y ligamentos, entre otras partes del cuerpo. Recordemos que la función principal del colágeno es sumar estructura, resistencia y elasticidad a los tejidos, algo clave para mantener una apariencia juvenil.
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