El baño es uno de esos lugares en casa que, por sus características, tiende a convertirse en un imán para las bacterias. La humedad constante y el uso diario facilitan la acumulación de suciedad y la proliferación de microorganismos.
Por eso, es fundamental mantenerlo limpio y desinfectado para asegurar un ambiente saludable. En esta nota encontrarás el modo de eliminar el sarro de tu baño y combatir de manera eficiente a los hongos.
Limpieza perfecta
Uno de los mayores problemas en el baño son las juntas del azulejo, esos pequeños espacios donde se acumula la humedad y, con ella, los hongos. Para dejarlas impecables, necesitas tener dos ingredientes, el primero de ellos es bicarbonato de sodio y el segundo jabón para platos.
Con estos elementos tan comunes, puedes preparar una pasta milagrosa que te ayudará a quitar de manera inmediata los hongos que por humedad de las paredes y juntas o por falta de limpieza correcta hayan proliferado en tu baño. Si sigues estos consejos lograrás mantener una limpieza adecuada y perfecta.
Preparación
Lo que debes hacer es mezclar dos cucharadas de bicarbonato con un chorro de jabón hasta obtener una consistencia homogénea, esto se va a convertir en una pasta que te ayudará a quitar estos enemigos llamados hongos y además te ayudará a quitar los restos de suciedad más difíciles.
Una vez que tienes tu pasta, aplícala generosamente sobre las zonas más sucias o amarillentas de las juntas, luego deja actuar esta mezcla durante unos 25 minutos y toma un cepillo y frota las áreas donde aplicaste la pasta. Empezarás a notar cómo la suciedad empieza a desaparecer casi como por arte de magia.
El bicarbonato de sodio, gracias a su capacidad corrosiva, es especialmente efectivo para este tipo de limpiezas y es un método que deja tus juntas relucientes, pero también es más seguro para tu salud y el medio ambiente que otros productos químicos más fuertes. No dejes de apostar por estos productos de limpieza caseros que te ahorrarán tiempo y dinero.