La lavanda es una de las plantas aromáticas que más beneficios le puede brindar a nuestra salud. Por ejemplo, su aroma es utilizado en aromaterapia para poder calmar los nervios y relajarnos ante una situación de ansiedad.
Sin embargo, para que la lavanda nos brinde todos sus beneficios, la misma tiene que estar sana y fuerte. Es por ello que hoy te enseñaremos un truco de jardinería para que recuperes aquellas hojas de la lavanda que están amarillas y secas.
¿Cómo recuperar las hojas secas de la lavanda?
Las hojas de la lavanda se vuelven amarillas cuando la misma ha recibido mucha agua, es decir que está muy húmeda. Siempre se aconseja regarla cada vez que su tierra esté seca y también es importante que tenga un buen sistema de drenaje, por lo que se puede airear el sustrato periódicamente.
Te aconsejamos revisar previamente el sustrato de la lavanda. Inserta un dedo en la tierra de la lavanda y comprueba si está seco o húmedo. También es aconsejable recurrir al riego por aspersión o por goteo, el cual suministra pequeñas cantidades de agua, sin inundar la planta.
¿Qué cuidados hay que tener con la planta de lavanda?
Además de controlar el riego de la misma, también se aconseja eliminar las hojas y ramas secas que tenga. Puedes hacer este paso con la mano o con una tijera de podar para no lastimar la planta. De esta manera, las hojas y las ramas se renovarán sin problemas y podrá tener un mejor aspecto en pocas semanas.
En cuanto a la exposición solar, es recomendable dejar la lavanda en un espacio donde pueda recibirla directamente, al menos por unas 6 horas. De esta manera, se garantizará que la planta aromática reciba los nutrientes necesarios y haga todos los procesos necesarios para conservar sus característicos colores intensos.
¿Dónde se aconseja colocar la planta de lavanda?
Para que esta planta nos pueda brindar todos sus beneficios, se aconseja colocarla en una maceta (escoge una con un diámetro de entre 30 y 40 centímetros) o directamente en el suelo. Una de las exigencias de esta planta es la luz. Es fundamental que reciba sol directo al menos durante seis horas diarias.
Sin lugar a dudas la lavanda es una de las plantas que más beneficios le puede brindar a nuestra salud. La lavanda se puede preparar como té o infusión, o incluso se pueden hacer cremas caseras.