La vida de los actores al trabajar puede ser un poco difícil. Así le ocurrió al actor Ryan Reynolds, quien está cumpliendo 46 años, que contó cuál fue el peor rodaje de su vida. Dar el toque perfecto a una escena, brindar al espectador de una experiencia inmersiva desde su asiento puede ser difícil.
Las estrellas de cine han protagonizado alguna que otra escena de riesgo que ha acabado muy mal o al menos, con un par de lesiones en su informe sanitario como le sucedió por ejemplo, a Jackie Chan en sus increíbles películas de artes marciales.
Ryan Reynolds pasó uno de los momentos más difíciles de su carrera al rodar una película con ADN española en 2010. En lugar de escuchar sus suaves chistes o bromas escurridizas durante el guion, él y todo el set vio cómo su respiración cambiaba hasta llegar al punto de peligrar su estado de salud. De hecho, se desmayó.
El peor rodaje de Ryan Reynolds
'Buried' en 2010 -Enterrado en España-, fue una película de suspense, intriga que llevó al protagonista, Ryan Reynolds, años después, a sentir una aterradora experiencia hasta tal punto de dejarlo inconsciente durante la propia grabación de una de las escenas.
Conociendo más en profundidad al actor en diversos papeles, vemos que quizás este género de películas no es el tipo de proyecto al que se tiene que ver asociado, pero para sorpresa de todos, la estrella de Hollywood aceptó esta propuesta y se encaminó a una de las cosas más difíciles que ha hecho en su vida, que como bien describe su título, la mayor parte del tiempo estuvo enterrado en un ataúd.
Ryan Reynolds en aquel entonces era muy joven, en el rodaje tuvo que utilizar una bolsa de papel y respirar en ella durante varias veces para así, intentar calmar sus nervios.
Sin causarse mucho daño psicológico durante los desmayos y prepararse muy bien físicamente para los posteriores papeles, el actor estadounidense pudo seguir con su carrera cinematográfica sin ningún tipo de problema.
El actor ha pasado por varias etapas. Sin embargo esta película fue el pero rodaje de la vida de Ryan Reynolds.