Beatriz Adriana, la exesposa de Marco Antonio Solís, es una de las actrices y cantantes más importantes de la historia de México. Sin embargo, su vida no ha sido color de rosas y ha sufrido algunos momentos de tristeza que le han forjado la personalidad que tiene en la actualidad.
El momento más duro de la vida de Beatriz Adriana fue en el año 2000 cuando perdió a su hijo, Leonardo, víctima de un asesinato. Luego de ser secuestado de forma violenta, el joven que en aquel entonces tenía apenas 21 años y toda una vida por delante, fue asesinado.
La historia del asesinato del hijo de Beatriz Adriana
En aquel entones, Leonardo estaba de viaje con un amigo y de repente desapareció. La exesposa de Marco Antonio Solís, sumida en la tristeza, inició un operativo de búsqueda angustiante. Los secuestradores le pidieron un rescate millonario y ella accedió, pero a su hijo lo encontraron sin vida en Tijuana.
En ese momento, Beatriz Adriana y el Buki mantuvieron reserva sobre el secuestro, pero con el paso del tiempo contaron lo sucedido. Según relató la cantante, los secuestradores le pidieron 800 mil dólares por la vida de su hijo. Ella no tenía ese monto, pero le pidió ayuda a Marco Antonio Solís, quien no dudó en darle el dinero.
Sin embargo, no llegaron a pagar el rescate. Las negociaciones que hicieron los especialistas quedaron truncas y Beatriz Adriana dejó de recibir llamados por parte de los secuestadradores hasta que se enteró lo que nadie quiere. Su hijo primogénito, Leonardo, apareció asesinado.
Este episodio marcó la vida de Beatriz Adriana para siempre y nunca lo pudo olvidar. Desde entonces su vida no fue la misma. Con el paso del tiempo, dijo: "en un principio fue normal sentir odio hacia los asesinos de mi hijo, pero después todo cambió y pude perdonarlos”.