El rey Carlos III tiene cáncer y esto saltó las alarmas sobre cuál es la línea sucesoria. También puso en relieve el interés sobre la salud de la familia real en Reino Unido. Hoy te contamos cuáles fueron las enfermedades royal que sufrieron integrantes de la realeza británica que sufrieron diferentes dolencias, algunas muy graves.
La noticia sobre la grave enfermedad del rey Carlos III se dio a conocer por el propio Palacio de Buckingham, que confirmó que sería sometido a un tratamiento para combatir la afección.
El comunicado real decía lo siguiente: “Durante la reciente intervención hospitalaria del rey por un agrandamiento benigno de la próstata, se observó otro motivo de preocupación. Las pruebas diagnósticas posteriores han identificado una forma de cáncer”.
De esta manera podemos ir un poco a la historia para conocer cuáles fueron los miembros de la familia real británica que también padecieron enfermedades graves o no tanto.
La patología de los Reyes
Dentro de la monarquía británica, varios miembros de la realeza fueron víctimas de algunas enfermedades como por ejemplo; la hemofilia. Esta enfermedad es considerada la patología de los Reyes o la maldición sanguínea de la Reina Victoria.
La hemofilia es una enfermedad hereditaria, caracterizada por la deficiencia en los mecanismos de coagulación de la sangre, lo que motiva que las hemorragias sean copiosas y difíciles de detener.
Aunque también, dentro de la realeza británica, la familia real ha sufrido diferentes enfermedades.
Enfermedades que padecieron miembros de la realeza británica
El rey Jacobo I de Inglaterra y VI de Escocia tenía una enfermedad neuromuscular hereditaria, la cual compartía con su padre y su hijo. Se lo caracterizaba por un andar extraño y piernas débiles
También trascendió que padeció algunos síntomas de porfiria, una enfermedad sanguínea que también afectó a varios monarcas británicos.
Por su parte, Jorge III padeció de trastornos mentales y nerviosos también como consecuencia de la porfiria. Según la ciencia, esta enfermedad puede provocar alucinaciones y problemas psiquiátricos, por lo que el monarca experimentó momentos de desequilibrio mental.
El caso más conocido es quizás, el de la enfermedad de Ricardo III, quien tenía una joroba y una pierna más corta. Su enfermedad era visible y se presume que padecía escoliosis, una curvatura lateral de la columna vertebral.
Por último, Enrique VIII sufrió de un grave deterioro fisco y mental. Alegan que esta enfermad hizo que se convirtiera en una persona completamente diferente.
Vemos en estos casos que la realeza británica no está exenta de los padecimientos físicos y hubo muchas enfermedades royal alcanzaron a la familia real. Hoy lamentablemente, le toca al rey Carlos III, padecer esta terrible patología como lo es el cáncer.