El cine y la fotografía muchas veces encuentran puntos en común que hacen que sus protagonistas realicen ambas actividades con la misma pasión. Un claro ejemplo es el caso de Isabel del Puerto, quien decidió dejar la actuación para dedicarse de lleno a la fotografía.
En esta oportunidad hablaremos de un caso totalmente opuesto, el de Ernesto Gómez Cruz. Nació en el puerto de Veracruz el 7 de noviembre de 1933, comenzó su carrera en un lugar inesperado: detrás de la cámara. Su pasión inicial era la fotografía, pero su vida dio un giro cuando un amigo lo alentó a explorar el arte dramático.
Aunque en algún momento había soñado con ser cantante, su timidez y la falta de preparación lo alejaron de ese camino. En cambio, el destino lo llevó a convertirse en uno de los actores más respetados del cine, teatro y televisión mexicana.
¿Cómo un fotógrafo se convierte en una leyenda del cine?
La carrera actoral de Gómez Cruz despegó en 1966 con su debut en la película "Los caifanes", dirigida por Juan Ibáñez. En este proyecto, compartió escena con talentos emergentes como Julissa y Óscar Chávez.
Su actuación en esta película le valió su primer reconocimiento importante: la Diosa de Plata, un premio que anticipaba la exitosa trayectoria que le aguardaba. A partir de entonces, Ernesto no dejó de trabajar, sumando más de doscientas películas a su currículum, colaborando con grandes directores como Miguel Littin, Felipe Cazals, Arturo Ripstein y Luis Estrada.
A lo largo de su carrera, Ernesto Gómez Cruz se consolidó como una figura esencial en la industria cinematográfica mexicana. Con ocho premios Ariel en su haber, es el segundo actor más galardonado con este prestigioso premio, solo superado por Damián Alcázar.
Entre sus papeles más recordados se encuentran los de Don José Reyes y Don Francisco Reyes en la película "El infierno", que dejaron una huella imborrable en la memoria colectiva de los amantes del cine. Pero su talento no solo fue reconocido en México; también recibió premios internacionales como en el Festival de Cine de La Habana y la Concha de Plata.
¿Cuál es el legado de Ernesto Gómez Cruz en el cine mexicano?
Además de sus premios, Gómez Cruz fue objeto de numerosos homenajes y reconocimientos a lo largo de su vida. En 2014, en la 56ª entrega de los premios Ariel, se le otorgó el Ariel de Oro, un reconocimiento a su trayectoria y a su contribución al cine mexicano. Este premio se sumó a una larga lista de galardones que reflejan la magnitud de su talento y su impacto en la industria.
Despedida de un gigante del cine mexicano
El 6 de abril de 2024, el mundo del cine mexicano perdió a uno de sus pilares más sólidos. Ernesto Gómez Cruz falleció a los 90 años, dejando un legado que será recordado por generaciones. La Asociación Nacional de Actores (ANDA) confirmó su deceso y, al igual que muchos de sus colegas, le rindió tributo por su invaluable contribución al cine y a la cultura mexicana.