El chisme es parte de las interacciones humanas. Todos tendemos a chismear de vez en cuando, unas personas lo hacen más que otras, pero es una acción que el humano realiza desde tiempos inmemorables. Sin embargo, ¿sabías que no es tan bueno echarse un chisme? Los científicos sugieren que los chismosos podrían tener efectos en la salud, como envejecer más rápido.
Ser chismoso podría acelerar el envejecimiento
El Instituto para el Futuro de la Educación (IFE), señala, en su página web, que el portal WebMd menciona que el chisme parece inofensivo, pero este también trae problemas como el agotamiento, la ansiedad, la depresión, los trastornos de estrés postraumático, ataques de pánico, culpa e incluso el suicidio.
Ante esto, National Geographic indica que Jesse Poganik, investigador del departamento de genética del Hospital Brigham and Women's, señala que el estrés severo hacen que el cuerpo envejezca más rápido: "El estrés severo puede desencadenar el aumento de la edad biológica...".
Es importante mencionar que los expertos señalan que cuando estamos expuestos a situaciones estresantes de forma prolongada, nuestro cuerpo libera hormonas como el cortisol, que pueden dañar las células y los tejidos. El chisme, al generar conflictos interpersonales y ansiedad, podría contribuir a aumentar los niveles de estrés y, por lo tanto, acelerar el envejecimiento.
¿Cuánto chismea una persona al día?
De acuerdo con el IFE, un estudio que se publicó en la revista Social Psychological and Personality Science titulado Who Gossips and How in Everyday Life?, una persona en promedio se la pasa 52 minutos en un día de 16 horas platicando con otros, es decir, echando chisme.
Si bien, chismear tiene algunos efectos negativos en la salud, también tiene su lado positivo, ya que el chisme ayuda a las personas a socializar. Esta práctica ayuda a que la gente tenga lazos más fuertes cuando comparten sentimientos de una tercera persona. ¿Y tú, eres fan del chisme?