Un estudio científico que fue presentado en el Congreso Europeo de Psiquiatría celebrado en París llamó la atención debido a que plantea que la ansiedad social se redujo en pacientes sometidos a una terapia de atención plena mientras estaban expuestos al sudor corporal obtenido del sudor de las axilas de voluntarios.
Elisa Vigna, del Instituto Karolinska en Estocolmo, fue la investigadora principal y explicó que las muestras se tomaron a personas voluntarias que debían visualizar fragmentos de películas seleccionadas por provocar estados emocionales como felicidad o miedo. Luego, el siguiente paso del estudio científico fue reclutar a 48 mujeres (de entre 15 y 35 años) con diagnóstico de ansiedad social, las dividieron en 3 grupos de 16 personas cada uno y las expusieron a una terapia de atención durante dos días.
Al presentar los resultados, Vigna explicó que "las mujeres que habían estado expuestas al sudor de los que habían visto películas divertidas o aterradoras respondieron mejor a la terapia de atención plena que aquellas que no habían estado expuestas a ningún tipo de olor corporal". Además, los encargados de realizar el estudio científico se sorprendieron porque el estado emocional de las personas no dependía de si el sudor provenía de películas de terror o una agradable.
¿El aroma del sudor ajeno calma la ansiedad?
La conclusión del estudio científico elaborado por el grupo de investigadores europeos indica que las señales que se transmiten en el sudor afectaron de forma positiva a la respuesta al tratamiento de las personas que padecían ansiedad social. Aparentemente, el solo hecho de estar expuesto a la presencia de otra persona es lo que genera este impacto.
A pesar de los resultados, los investigadores aclararon y remarcaron que este estudio científico no fue más que un piloto y que siguen trabajando y estudiando. Por el momento, están trabajando en un experimento con una estructura similar en la que incluyen el sudor de personas que vieron fragmentos de películas consideradas emocionalmente neutrales.
Según explicaron los investigadores, algo en lo que van a tener que trabajar es en ver si es posible identificar y aislar las moléculas que causan los efectos observados en el estudio para que puedan ser utilizadas de forma terapéutica. El objetivo de este estudio científico es determinar si este tipo de terapia de salud mental proviene de la percepción inconsciente de señales emocionales específicas o si solo tiene que ver con la presencia humana independientemente de las emociones vividas.