Especialistas aseguran que la postura que adoptamos al dormir dice mucho de nuestra personalidad. Ademas, se supo que el lado que elegimos en la cama también manifiesta distintos comportamientos que muchas veces callamos.
En este marco, las creencias y tradiciones sobre de qué lado de la cama deben dormir los miembros de una pareja varían alrededor del mundo. Algunas culturas sostienen que el lado de la cama puede influir en la dinámica de la relación y en la felicidad conyugal.
¿Hay alguna base científica detrás de estas creencias? Según algunos estudios y especialistas en psicología del sueño, la respuesta puede ser tanto sí como no, dependiendo de varios factores que van desde la psicología individual hasta la distribución del espacio en el dormitorio.
¿De qué lado de la cama debe dormir la mujer para ser feliz?
Los terapeutas de pareja y los expertos en relaciones a menudo sugieren que la clave para una relación feliz no reside en el lado de la cama que ocupa la mujer o el hombre, sino en la capacidad de comunicarse y hacer compromisos.
Si hay desacuerdos sobre qué lado de la cama es mejor, lo importante es tener una conversación abierta y llegar a un acuerdo que satisfaga a ambos. Este acto de comunicación y compromiso puede fortalecer la relación más que cualquier posición física en la cama.
Aunque, la licenciada Rocío Jazo, que aborda muy bien temas como las constelaciones familiares, sostuvo en un reciente posteo en sus redes sociales: “La mujer debe dormir del lado izquierdo de la cama y el hombre, de la derecha. Esto es para que se tomen de la mano y esa es la manera perfecta en la biodescodificación y en las constelaciones, para que la energía de pareja esté abierta”.
¿Qué dice la psicología sobre la elección del lado de la cama?
Más allá de las tradiciones culturales, la elección del lado de la cama puede estar influenciada por factores psicológicos y de comodidad personal, según profesionales en el tema.
Por ejemplo, algunas personas prefieren dormir más cerca de la puerta por razones de seguridad, mientras que otras pueden elegir un lado basado en la proximidad a una ventana o baño.
Además, las preferencias individuales y las rutinas establecidas en la relación también juegan un papel crucial. Si uno de los miembros de la pareja tiene una necesidad particular, como dormir del lado que favorece una mejor postura o menor ruido, ceder a esa preferencia puede contribuir a la armonía y felicidad conyugal.
Encontrar el equilibrio adecuado en todos los aspectos de la vida en pareja, incluido el sueño, es fundamental para la felicidad conyugal. Priorizar la comunicación y el compromiso puede ayudar a resolver este y otros dilemas cotidianos, fortaleciendo así la relación y asegurando una convivencia feliz y saludable.