Adentrarse en el yoga trae múltiples beneficios, tanto a nivel físico como mental, como este ejercicio súper simple que mejora tu flexibilidad y salud sexual. Esta práctica milenaria, además, esconde muchos simbolismos y significados que se entremezclan con el mundo espiritual.
Tal es el caso de la postura del león, conocida en sánscrito como Simhasana, una de las más singulares y poderosas del yoga. Si realizas este ejercicio, debes conocer qué hay detrás de esta popular práctica.
¿Qué significa la postura del león en yoga?
Derivada de la palabra "Simha" que significa león, y "asana" que significa postura, esta pose no solo se destaca por su nombre, sino también por el impacto de su significado tanto a nivel físico como mental.
La postura del león se asemeja a un león rugiente, evocando la fuerza, la determinación y el poder característicos de este majestuoso animal.
El león ha sido una figura simbólica prominente en la mitología india, representando poder, voluntad y determinación. La diosa Durga, por ejemplo, monta un león como símbolo de su dominio sobre estas cualidades.
En el contexto del yoga, la postura del león está dedicada a Narasimha, una encarnación mitad hombre mitad león del dios Vishnu, que simboliza la destrucción de los demonios internos y la manifestación de la valentía y la rectitud.
Simhasana también se menciona en textos yóguicos tradicionales como el Hatha Yoga Pradipika, destacando su importancia histórica y espiritual.
¿Cómo se realiza la postura del león?
La postura del león se practica en una posición sentada, generalmente considerada de nivel intermedio. Para realizarla, siéntate sobre tus rodillas con los tobillos cruzados y las palmas de las manos sobre las rodillas.
Abre la boca ampliamente, saca la lengua y estírala hacia abajo tanto como puedas. Al mismo tiempo, abre bien los ojos y mira hacia arriba, manteniendo la barbilla cerca del pecho.
Esta postura se combina con una técnica de respiración conocida como "aliento de león", donde se produce un rugido desde la parte posterior de la garganta.
¿Cuáles son los beneficios físicos de la postura del león?
A nivel físico, la postura del león tiene múltiples beneficios. Estira y fortalece los músculos faciales, manteniendo la firmeza y el brillo de la piel del rostro.
Además, esta postura ayuda a aliviar problemas de garganta, nariz, oído y boca, mejorando la claridad del habla y reduciendo la tartamudez. También estimula el hígado, controla el flujo de bilis, mejora la digestión y regula las glándulas tiroides y paratiroides.
La práctica regular de Simhasana también fortalece los músculos de la garganta y las cuerdas vocales, promoviendo una respiración más profunda y efectiva.
¿Qué efectos tiene la postura del león en la mente y las emociones?
La postura del león no solo impacta el cuerpo, sino también la mente. Al practicarla, se produce un sonido rugiente que ayuda a liberar energía negativa y pensamientos estresantes, promoviendo la calma y la relajación.
Esta postura es especialmente útil para las personas introvertidas, ayudándolas a externalizar sus emociones y ganar confianza. Si es tu caso, puedes complementar con estos ejercicios para estimular la felicidad.