Vivimos en una era donde la atención se ve constantemente desafiada por múltiples estímulos, por lo que se han vuelto populares las soluciones a estos elementos de distracción, como esta infusión que te ayuda a la concentración.
Sin embargo, existe una forma de contrarrestar la dispersión y estar más presentes en cada momento que también se relaciona con una de las actividades más populares del mundo: el yoga.
¿Qué posturas de yoga son ideales para la concentración?
Dharana, que significa "concentración" en sánscrito, es la sexta parte de los Yoga Sutras de Patanjali.
Este concepto se refiere a mantener la concentración en una sola cosa, preparando la mente para la calma y estableciendo la base para etapas más profundas de meditación.
Practicar Dharana implica enfocar toda tu atención en la respiración o en el movimiento durante una sesión de yoga, promoviendo un estado de presencia plena que se extiende más allá de la práctica física.
Existen varias posturas de yoga que son especialmente efectivas para mejorar la concentración, el equilibrio y la claridad mental. Algunas de las más recomendadas incluyen:
- Garudasana (postura del águila): Ayuda a mejorar el equilibrio y la concentración al enfocarte en mantener la postura.
- Natarajasana (postura del bailarín): Promueve la concentración y el equilibrio mientras trabajas la flexibilidad y la fuerza.
- Vrksasana (postura del árbol): Una postura clásica de equilibrio que centra la mente y fortalece el cuerpo.
- Virabhadrasana III (guerrero III): Fomenta la concentración y el equilibrio mientras fortaleces las piernas y el núcleo.
- Bakasana (postura del cuervo): Desafía tu equilibrio y concentración, fortaleciendo los brazos y el abdomen.
- Paschimottanasana (postura de la pinza sentada): Calma la mente y estira la columna, promoviendo la introspección y la concentración.
- Posturas invertidas como Sirsasana (postura sobre la cabeza) y Sarvangasana (postura de la vela): Mejoran el flujo sanguíneo al cerebro, aumentando la claridad mental y la concentración.
¿Qué relación tiene la meditación con la concentración?
La meditación y el yoga son prácticas que, cuando se realizan de manera constante, pueden mejorar significativamente nuestra capacidad de concentración.
Estudios recientes han demostrado que la práctica regular de yoga en centros escolares mejora la concentración, autoestima, memoria, atención y humor de los niños.
En adultos, las técnicas de meditación y respiración ayudan a disminuir las distracciones en el trabajo, aumentando la productividad y la claridad mental.
Según la revista Journal of Physical Activity and Health, tan solo veinte minutos de yoga al día pueden mejorar tu concentración y energía mental.
¿Cómo aplicar la atención plena en la vida diaria?
Aplicar la atención plena no se limita a la meditación o al yoga; también puedes integrarla en actividades cotidianas. Por ejemplo, cuando salgas a caminar, concéntrate en el paseo en lugar de tomar fotos del paisaje.
Si estás cocinando, enfócate en los ingredientes y en el proceso, no en el programa de televisión de fondo. Al comer, disfruta de los sabores sin distraerte con las redes sociales.
Esta práctica de estar completamente presente en cada actividad mejora tu capacidad de concentración y te ayuda a vivir de manera más consciente.
¿Cómo integrar la meditación y el pranayama en tu rutina?
Además de las posturas de yoga, la meditación consciente y las técnicas de respiración (pranayama) son esenciales para mejorar la concentración y la memoria.
Dedica unos diez minutos diarios a la meditación en un lugar tranquilo. Practica pranayama como Nadi Shodhana (respiración alterna), Kapalabhati (respiración de fuego) o Bhastrika (respiración de fuelle) o esta increíble rutina de yoga que te da energía en la mañana.